Saturday, May 14, 2005

Victorias Pírricas

En un tercer capítulo de la saga orporativo que he venido presenciando, dónde el primero era el ataque, el segundo el fallido conato de retaliación, viene el tercero y final en el que se relata la vida de vencedores y vencidos, después de la batalla.
Es cierto, parece que la gerencia ganó, obtuvieron lo que querían, sacaron a quién querían, dejaron claro su punto de "o esta de acuerdo, o se va". Aparentemente fue una victoria completa. Sin embargo, desde mi punto de vista fue una victoria como las de Pirro, rey de Epiro, en la que pierde mas el vencedor que el vencido.
La normalidad se abre paso y, pase lo que pase, la vida trata de seguir. Eso es lo que ha sucedido. Contrario a la idea que muchos tenían, el mundo no se acabó, la empresa no se desmoronó de un día para otro. Las cosas siguen, sin embargo, si hubo un cambio, nada despreciable, en la moral y en la manera de hacer las cosas.
La víctima mas importante fueron las ganas. Esas murieron. Hay que hacer las cosas bien, claramente, pero si la gerencia ordena hacer alguna bestialidad, pues ahora se hace y no se protesta demasiado. Antes habría habido guerra, se habrían dado argumentos. Ya no. Parece como el ejército. No se critican las órdenes, simplemente se llevan a cabo.

Si, ganaron, lo lograron, pero, a que precio?

Yo, honestamente, prefiero que me critiquen y que m digan y que reten mis decisiones, eso me obliga a pensar y a tener las cosas claras. El problema es que la gente no abre la boca, y cuando lo hacen no son claros al respecto. Me gustaría que me dijeran "pienso que esta haciendo mal esto y esto por esta y esta razón". Ya si yo hago o no hago cosas al respecto, pues problema mio.

Friday, May 06, 2005

Follow up: Ni es lo mismo ni es igual

El movimiento de protesta colectiva fue abortado. El lugar nunca se ha caracterizado por las capacidades de madrugar de la gente, por lo que si a las 8 de la mañana no hay nadie no es demasiado fuera de lo común. A las nueve de la mañana, sin embargo no había llegado nadie, eso ya es algo extraño. La conspiración afirmaba que había que llegar después de medio día. La gente llegó a las 10, por lo que a los ojos del resto de la humanidad simplemente fue un movimiento extraño, una resaca colectiva, pero no una conspiración. Al final de cuentas no pasó nada. El día a día realmente no cambió, pero algo adentro si cambió. Las ganas no son las mismas, el espíritu no es el mismo, la entrega no es la misma.
Que lecciones saca uno de una cosa como esas?

  • Esa cosa que llaman el clima organizacional, por la que tanto se preocupan los departamentos de recursos humanos si existe. Es un factor invisible e increiblemente poderoso, que define la manera en la que uno escoge aproximarse a su trabajo.
  • La vida continua. Por mas que uno piense que el mundo se va a acabar no lo hace. Y aunque el golpe sea duro y uno piense que no va a poder adaptarse a los cambios asi de rápido y asi de abruptamente, si lo hace.
  • A menos que uno sea el dueño del chuzo uno es poco mas que un engranaje. Puede llegar a ser un engranaje muy complicado, muy caro y muy difícil de reemplazar, pero nunca sera ireemplazable. Por otro lado, si uno es el dueño del chuzo entonces el conjunto de preocupaciones es otro muy diferente.
  • El pueblo unido jamás sera vencido es una consigna para las marchas por la carrera séptima el día del trabajo, que irónicamente es uno de los festivos mas universales que hay. Al pueblo lo separarán con zanahoria o con garrote.
  • Este weblog esta volviendose extremadamente derechista.

Wednesday, May 04, 2005

Peer Pressure

Para mi la adolescencia fue una fase bastante complicada de la vida, caracterizada, mas que nada por una constante presión de grupo y el consiguiente aislamiento al que conducía el no ir con las modas y con las presiones de los otros. La moda en una época era embriagarse como brutos, después era hacerse tatuajes, etc etc. Yo no tomaba tanto, y nunca me hice un tatuaje, pero era toda una labor de autoconvencimiento el no ceder ante la presión de todos los mal llamados amigos.
Hoy, varios años después algo parecido esta ocurriendo y me siento como en un sindicato, con "el pueblo unido jamás será vencido" con la desventaja de que no se en que lado estoy. No se si soy de los trabajadores o de los patrones.

La situación es la siguiente:
El gran jefe perdió su puesto. Para muchos de nosotros el gran jefe era toda una inspiración, era quién se encargaba de mostrar la visión, de aunar los esfuerzos de todo el equipo y de encargarse de que todos fueran para el mismo sitio. En una palabra, era al que "le cabía el problema en la cabeza". A pesar de que nunca obligo a nadie a hacer nada lograba que la gente fuera mas alla, impulsaba a la gente a dar lo mejor de si.
Las circunstancias de la pérdida de puesto no son enteramente conocidas, por lo menos no desde todos los puntos de vista. Hay una visión parcial, pero en esas cosas uno nuca sabrá como fue que realmente ocurrió.
Para todo el equipo es una pérdida, una pérdida muy grande. Hay que hacer algo.
De todas maneras, la suerte esta echada, el gran jefe no vuelve, ya desocupo el puesto y salió, ya no hay nada que hacer.
En estas circunstancias se cocina el descontento. Conviene establecer desobediencia civil? se preguntan todos.
Que tal si no va ninguno mañana a trabajar? sugiere alguno.
Si, así se darán cuenta de que a nosotros no nos pisan así como así, secunda algún otro.

NO. NO, NO, NO y NO. Pragmáticamente hablando. La desobediencia civil no tiene ningún sentido en una entidad privada y con ánimo de lucro. Eso sirve en causas políticas. Las empresas se dirigen pensande en cumplir un objeto social, lo que se interponga en ese objeto pues tiene que ser modificado. No es que me guste, pero así es. No es una democracia, no es un gobierno de la mayoría o de la colectividad. Es una asociación de personas para realizar una labor. Las motivaciones de los miembros de la organización pueden ser distintas. Probablemente los dueños esten pensando en maximizar el retorno a su inversión, los empleados estén pensando en conseguir buenas condiciones laborales, o en ganar mas dinero. Eso esta bien, cada cuál busca lo que quiere. Si no le gusta, tiene la libertad de irse para dónde quiera. Es distinto cuando se habla de las condiciones sociales o de lugares en los que no hay oportunidad. Por eso no me uno a la protesta ni a la desobediencia, no beneficia a nadie, no va a devolver al jefe, no va a mejorar el amb iente, y si va a poner a todo el mundo en una situación delicada ante la gerencia. Si yo fuera el gerente y los empleados me arman sindicato, tristemente se van.